LOS REYES, Mich, 11 de enero de 2019.- A consecuencia de las graves heridas que sufrió en diversas partes del cuerpo, dejó de existir en el Hospital Regional de esta ciudad un joven vecino de Peribán, luego de que la motocicleta en que viajaba junto con un menor de tan solo 13 años de edad -quien se salvó de milagro-, se impactara contra una camioneta en la localidad de San Sebastián, perteneciente a esta localidad.
El conductor de la otra unidad implicada quedó a disposición de las autoridades.
El ahora occiso fue reconocido por sus familiares como José Juan A., de 22 años de edad, originario y vecino de Peribán, mismo que conducía una motocicleta color verde con negro.
Trascendió que alrededor de las 18:00 horas de ayer viernes, los muchachos se trasladaban a bordo de la motoneta sobre la carretera que va de Los Reyes a Los Chorros del Varal a un rancho de su propiedad y al llegar al entronque de San Sebastián chocaron contra una camioneta, quedando el joven bajo la unidad y sufriendo severos daños en su humanidad.
El conductor fue requerido por vecinos del lugar y entregado a elementos de la Policía Michoacán, quienes lo trasladaron a la cárcel preventiva, mientras que el herido fue llevado por paramédicos de Protección Civil al nosocomio arriba indicado para que le
dieran la atención requerida, pero lamentablemente dejó de existir minutos más tarde.
El pequeño que lo acompañaba se quedó en revisión médica pues sufrió una severa crisis nerviosa, mismo que dio a las autoridades los datos de los familiares del finado, para que acudieran a reclamar el cuerpo.
Personal de la Fiscalía del Estado realizó las actuaciones pertinentes del caso y ordenó que el cadáver fuera enviado al Semefo Local para que se le practicara la necropsia de rigor.
Dos jóvenes heridos en volcadura
Cabe señalar, que cuando se realizaba la cobertura noticiosa del accidente de moto, al mismo Hospital Regional fueron ingresados dos jóvenes con diversas lesiones, pues se habían volcado con un automotor en la misma carretera, pero con diferencia solamente de media hora, por fortuna sus heridas no ponían en riesgo