*Durante el pasado Día de Muertos, el estudio anunció su intención de realizar una nueva versión que odría incluir el pensamiento político de Traven..
Macario es una de las películas más queridas del cine mexicano, ya que se desarrollada en el Día de Muertos, una de las fechas más tradicionales en toda la región. Está basada en la novela de B. Traven, sin embargo, la película siempre ha tenido el protagonismo sobre el libro. Aunque se trata de un clásico difícil de superar, este 2021 se anunció lo inesperado: Se hará un remake de Macario. De acuerdo con Variety, la película protagonizada por Ignacio López Tarso en 1950 tendrá una nueva versión que buscará acercarse a las nuevas generaciones.
Aún tendremos que esperar, ya que siempre que se anuncian nuevas versiones aparece un al halo de suspenso sobre si se concretará el proyecto o no. Sin embargo, la productora independiente El Estudio ya anunció la compra de los derechos y anunció que será Gonzalo Maza, coguionista de Una Mujer Fantástica, quien adaptará el nuevo libreto. Como productor del remake de Macario se tendrá a Pablo Guisa.
De acuerdo con Gonzalo Maza, Macario refleja un pensamiento antisistema de Traven, quien utiliza a Macario como pseudónimo de Moritz Ratheneau, una anarquista alemán que viajó a México y terminó escribiendo sobre la población indígena y las opresiones que sufría. Sin embargo, aún se desconoce el nuevo rumbo del remake de Macario, ya que al mismo tiempo se trata de una adaptación de un cuento de los hermanos Grimm.
Sinopsis del remake de Macario
El filme tiene por escenario el virreinato de la Nueva España, donde un humilde leñador de origen indígena llamado Macario vive al borde de la miseria junto a su familia. Debido a su pobreza, Macario vive obsesionado con poder comer un banquete sin tenerlo que compartir con nadie.
Al ver su sufrimiento, Felipa, esposa de Macario, decide robar un guajolote y dárselo para que él lo coma en soledad. Para evitar que sus chilpayates (hijos) le pidan del animal, Macario se adentra en el bosque.
Ya en el bosque, tres personajes misteriosos se aparecen al indígena y le piden que les comparta de su alimento. El primero de ellos, el Diablo, se muestra vestido como un rico hacendado. Para persuadir a Macario de que le comparta de su comida, Satanás le ofrece distintas riquezas, pero no tiene éxito.
Después, Dios se hace presente bajo la apariencia de un humilde anciano. Del mismo modo que su antecesor, pide a Macario un poco de su guajolote. Pese a ser Dios, el protagonista se niega a compartir de su manjar, argumentando que Él es dueño de todo y no necesita de su pavo.
Finalmente, la Muerte aparece como un personaje famélico y con un ropaje muy semejante a la de Macario. Para convencer al indígena de que le comparta de su comida, le dice que lleva mucho tiempo sin comer, con lo cual Macario se conmueve y acepta convidar parte del ave.
Un ícono mexicano
Aunque Bruno Traven vivió en México y se amistó con artistas como Frida Kahlo y Gabriel Figueroa, su novela Macario conserva un espíritu europeo. Por ello, durante la adaptación fílmica Roberto Gavaldón decidió hacer algunos ajustes.
El cambio más imponente es el papel del Día de Muertos, ya que mientras en la novela sólo se menciona de forma contextual, en el filme cobra un amplio protagonismo para mostrar la importancia que tiene el fin de la vida en la cosmovisión mexicana.
El mito ilustrado de forma fantástica es, simultáneamente, un retrato social de las clases más desfavorecidas del siglo XX. Así, todos estos elementos permiten constituir una película cuya principal característica es ser un tributo de la mexicanidad. Esto contrasta con la novela de B. Traven, quien hizo su adaptación a forma de fábula moralizadora.
Con información de México Desconocido