*Tenemos una situación de precariedad en los instrumentos jurídicos y administrativos para que la gestión integral de riesgos sea una realidad, tanto en el ámbito estatal como en el municipal.
Morelia, Mich, 31 de julio de 2022.- La situación de pobreza que priva en grandes franjas de la población, ahonda su condición de riesgo frente a desastres naturales, recalcó la diputada Fanny Arreola Pichardo, coordinadora de la Representación Parlamentaria de la LXXV Legislatura del Congreso del Estado.
La diputada por el Distrito de Apatzingán recordó que Michoacán es un estado con una alta vulnerabilidad de su población frente a los riesgos que representan los fenómenos naturales, debido en mucho a los altos niveles de pobreza que presenta la mayoría de la población.
“Aunado a lo anterior tenemos una situación de precariedad en los instrumentos jurídicos y administrativos para que la gestión integral de riesgos sea una realidad, tanto en el ámbito estatal como en el municipal”.
Fanny Arreola apuntó que la Organización de las Naciones Unidas refiere que cada año los desastres cuestan a la economía mundial aproximadamente 520 mil millones de dólares, desplazando a millones de personas y empujando a muchos de ellos a la pobreza extrema.
Abundó que los riesgos se agudizan ante la falta de educación y cultura sobre la protección y prevención, además de las condiciones y ubicación desfavorables de las viviendas, dispersas y construidas con materiales endebles, en localidades de difícil acceso, sin energía eléctrica y/o limitados por insuficientes medios de comunicación en caso de emergencias, lo que constituye un escenario con mayor grado de vulnerabilidad.
“La pobreza y la vulnerabilidad a los desastres naturales están muy claramente vinculadas, particularmente en donde existen grandes concentraciones de personas que viven en la pobreza, las cuales tienden a asentarse en áreas marginales, como son las riberas de ríos, donde resultan especialmente vulnerables a las catástrofes”.
Subrayó que no debe olvidarse que en situación de desastre, el hacinamiento de la población facilita el surgimiento, la transmisión o el resurgimiento de enfermedades.
“Desde el Congreso del Estado debemos trabajar para orientar desde el ámbito legislativo, que Estado y Municipios se fortalezcan en materia de Protección Civil, en donde se garantice suficiencia presupuestal que permita prevenir desastres y en caso de que éstos se susciten, atender de manera eficiente a la población”, refirió.