Bióloga ayudó a salvar al guacamayo azul de la extinción tras 30 años de trabajo

*Lo que inició como una excursión de campo le cambió la vida a Neiva Guedes.

En 1989, en un viaje de campo observó a varias aves y se enteró que estaban desapareciendo rápidamente. En ese momento, decidió hacer algo para prevenirlo, con la convicción de que otros la gente debería poder observar guacamayos jacinto en su hábitat natural. 

Esto se convirtió en un enfoque de vida importante para ella: la lucha por la conservación del guacamayo jacinto, lo que resultó en el Proyecto del Guacamayo Jacinto. Desde entonces, ha dedicado su vida a la conservación de estas aves en el Pantanal brasileño.

Con el paso de los años, lo que inicio con un viaje de campo en 1989 se transformó en una misión de vida. Ahora la especie se encuentra en “estado vulnerable” y continúan trabajando por un mejor futuro para su conservación.  

Además se dedican a trabajar con la comunidad local para que entiendan la importancia de esta ave, la protejan y eviten su venta.

“Durante la temporada de inundaciones, algunos nidos quedan aislados por el agua. En estas ocasiones utilizamos tractores, lanchas, caballos, o si es necesario vamos a pie, llevando todo el equipo necesario en mochilas hasta por varios kilómetros, dependiendo de la ubicación del nido

Adicionalmente, durante el transcurso del año, trabajamos con la participación comunitaria a través de la educación ambiental para niños, ganaderos y propietarios de ranchos o en las escuelas, damos charlas, realizamos talleres de costura, manualidades y otros para mujeres de escasos recursos. y participamos en ferias y exposiciones” comentó Neiva

Esta ave es una de las tantas que ayuda a dispersar las semillas de las que se alimentan. Un buen mecanismo para que germinen y que toda el área crezca brindando una nueva base para el resto de especies de la cadena de alimentación.

El guacamayo azul llega a medir alrededor de un metro de pico a cola y pesa alrededor de 1.2 a 1.5 kilos y es fácil de identificar pro su color y las franjas amarillas en su rostro.

Una de las principales características de estas especies son sus cabezas grandes y robustas que sostienen picos fuertes, altos y curvos diseñados para romper y descascarar semillas.

Tanto los machos como las hembras tienen un hermoso plumaje de colores vibrantes de incomparable belleza. Por lo general, los sexos son bastante similares.

Es un ave de carácter social, inteligente y puede vivir un poco más de 40 años. Además suelen tener un comportamiento de pareja y viven en bandadas con otras aves. Son de naturaleza curiosa y no temen a lo desconocido aunque esto puede generarles problemas.

Los guacamayos y los loros son algunos de los ejemplos más impresionantes de aves tropicales. Precisamente porque son tan hermosos, con su plumaje coloreado, porque se adaptan fácilmente al cautiverio y tienen la capacidad de imitar e interactuar con los humanos, los Psittacidae son el grupo más amenazado del mundo.

El interés humano por los guacamayos es tan antiguo que durante muchos siglos han sido capturados para servir como mascotas y por sus plumas, que se utilizan como adornos. Por esta razón, el Proyecto Guacamayo Jacinto ha utilizado al guacamayo jacinto como especie insignia para la conservación.

La idea de esta mujer tuvo tanto peso y fue tan bien recibida que ha recibido diversos premios y no solamente eso, ha generado un impacto positivo para la sociedad. Sin duda nos muestra que todos podemos aportar si combinamos la pasión con un objetivo para lograr el bien común.  Si quieres saber más, puedes conocer sobre su iniciativa en su sitio web acá.

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