*En entrevista, adelantó que ahora trabajará por los derechos de lo que la sociedad considera como basura humana.
Apatzingán, Mich., a 22 de julio de 2020.- “Con la suspensión de mis funciones como sacerdote, el obispo de la Diócesis de Apatzingán, me hizo un favor, pues me dedicaré a trabajar fuertemente con los indigentes, drogadictos y la comunidad gay”, manifestó el padre Gregorio López Gerónimo.
En entrevista, el conocido Padre Goyo expuso que supuestamente fue suspendido por desacatar las normas de la iglesia en cuanto a la tramitología para los sacramentos, “pero detrás de este cese de mis actividades como sacerdote, está el hecho de que he señalado fuertemente a la delincuencia organizada, el narcotráfico, la corrupción, la impunidad y la pederastia que protege la iglesia”.
Expuso que además de él, hay 11 sacerdotes en la banca, a quienes asesorará legalmente para que reciban lo que por derecho les corresponde, “hay padres que tiene hasta 50 años de servicio que también están suspendidos y como trabajadores que somos y que pagamos impuestos, tenemos derechos laborales”.
El padre Goyo dijo que en Apatzingán continuará trabajando con los más desvalidos en el albergue para indigentes y drogadictos “El Buen Samaritano”, además de que formará un club con la comunidad LGBTTTI.
“Estaré más cerca de esas personas que la iglesia considera basura humana y defenderé sus derechos”, concluyó.